LUCHO GATICA SORPRENDE A PROFESORA Y POETISA VIROLEÑA

Por René Alberto Contreras.

   En abril de 1966 el Hotel El Salvador Intercontinental (hoy Crown Plaza) anunció la presentación, en su Rendezvous, del cantante chileno Lucho Gatica, famoso en aquellos años por su interpretación de canciones como Contigo en la distancia, Piel canela, Si me comprendieras, La puerta y otras melodías.
   En Zacatecoluca una de sus grandes admiradoras, la profesora y poetisa Marta Sosa Molina, decidió escribir una carta al gerente del hotel, el señor Alfredo C. Hatt, solicitándole que le pemitieran asistir al espectáculo como invitada. La petición fue aceptada y en el debut estuvo presente la ciudadana viroleña.
   "La sorpresa que tanto ud. Sr. Hatt, como la señorita Cecilia Castro (de Relaciones Públicas) me hicieron vivir no la olvidaré en todos los años de mi vida. Les aseguro que ni la Cenicienta fue tan feliz en su primer baile como lo fue esa noche esta humilde maestra provinciana", escribió Marta Sosa en una carta de agradecimiento que dirigió al ejecutivo del hotel.
   Parte de esa misiva fue publicada por el periodista cubano Cesar Temes en su columna "Del Ambiente" en la página 33 de El Diario de Hoy del 11 de abril de 1966.
   Gatica vino acompañado del pianista mejicano Mario Patrón Ibarra, en esa presentación se ofreció música bailable con Los Melódicos de Luis Alonso Polío, anunciándolo como un"Show Nocturno" con un costo de 15 colones ($6.00 dólares al cambio de esa época).
   La sorpresa de Marta no solamente fue por la invitación sino que el cantante se dirigió a su mesa para saludarla.

Profesora y poetisa Marta Sosa Molina
     La profesora fue una de las intelectuales arraigadas a su tierra, luchando por hacer feliz a sus amigos, a sus alumnos, a sus compañeros. Batallando por llevar el mensaje sublime de la palabra, la belleza del  lenguaje, tarea que la compartió con otros idealistas de la ciudad que al final trabajaron en conjunto en torno a la Casa de la Cultura.
   "Martha Sosa Molina, nació poetisa. Es una bendición que viene de familia, su abuela Lucía Avendaño de Sosa, recibió honores de mandatarios por una composición poética, A los cuatro años, las musas rondaban la virginal presencia de Marta, que a los 17 años, gana su primer premio", se afirmó en 1992 en la revista Asi es mi Pueblo, que editaba el ya fallecido periodista Mauricio Hernández Bolaños.
   El artículo cerró con una cita de la maestra: "Vivamos en paz y con amor, que la vida es tan corta y no vale la pena vivirla entre disputas y rencores".
    Marta Sosa Molina nació el 14 de mayo de 1924 y murió el 15 de junio de 1994. Era hija del doctor en química y farmacia Gerardo Sosa y la señora Leticia Molina, en total eran 8 hermanos, ella tuvo cinco hijos: Leopoldo, Nelson, Ronald Alberto, Edgardo y Mauricio, según los datos proporcionados por su sobrina Lety Sosa López, en entrevista hecha en San Salvador el 20 de mayo de 2016.

Familia Sosa *
    Los esposos Sosa Molina tuvieron ocho hijos, del primero al octavo fueron: Lucía, que falleció a los 12 años; Mariano, Giordano, Mauricio, Gerardo, Soledad, Rigoberto y Marta.
   Mariano estudio para abogado y tuvo una destacada labor y dedicación en actividades culturales y sociales de la ciudad. Giordano estudió para químico farmacéutico y para profesores: Gerardo, Marta y Soledad.
   Marta trabajó en San Juan Nonualco, Santo Tomás, Olocuilta y en las escuelas de varones "15 de Septiembre", en el barrio Analco y en la "Francisco Castañeda", en el barrio San José, de Zacatecoluca. En las designaciones oficiales que le hicieron desde la Dirección General de Educación Primaria y Normal la citaban con su nombre completo: Lucía Marta Sosa Molina.
   "En lo particular recuerdo en mis memorias de infancia a la profesora Marta Sosa Molina como una mujer que siempre andaba libros bajo el brazo, tremendamente cariñosa, de modales finos y de temperamento contundente", la describió el psicólogo Wilfredo Mármol Amaya en una crónica que publicó el 16 de mayo del 2015 en el suplemento Tres Mil, de Diario CoLatino.
   Marmol siguió señalando que la poetisa "Dibujaba una sonrisa a perpetuidad en su rostro y como maestra solía regalar poesía y lectura de sus cuentos en el salón de clase".
   Su sobrina Lety mencionó que el periodista y propietario del Diario Latino, Miguel Pinto, era amigo del papá de Marta y en una ocasión que lo visitó leyó un poema que ella había escrito a los 7 años de edad, lo pidió para publicarlo en su periódico y desde entonces siguió escribiendo a lo largo de su vida.

Lety Sosa López y Profesora Alicia Sosa de Palacios
    Pero Marta no solamente escribió poesía, hizo relatos, crónicas, cuentos y canciones como "En la luz de una estrella", dedicada a su madre Leticia y que Tere Corcios grabara con una orquesta capitalina,  refirió Lety en la entrevista con Los Motetes del Tecolote. Añadió que Eduardo Fuentes incluyó en su repertorio la melodía Serenata, también de autoría de la profesora.
   Lety durante la entrevista cantó Ichanmichen cuya letra la recuerda exactamente, sin hacer ninguna consulta en apuntes u otro documento, asi como también canta otras que ella aprendió escuchándolas a su tía.
   "Bendito pueblo donde nací - Tiñe sus tardes de carmecí - Y son sus aguas color de mar - De mi virola para soñar - Hay en Ichanmichen un agua azul - Que el sol destella de plata y luz - Ven a sus aguas y aprende a amar - bajo las frondas de aquel palmar", dice en una de sus parte la canción dedicada al balneario.
   También Lety recuerda un poema que Martha hizo para su sobrino Salvador cuando de unos 5 años lo vió con un zapato al que le habían recortado la punta y por el salían los dedos del niño.
   "Poema a Salvador. El dedito de mi pie - muchas cosas quiere ver - y por eso a mi zapato - en su punta fue a romper - !ay que pícaro dedito¡ - cómo todo quiere ver - a mi lindo zapatito - un huequito le fue a hacer", recitó Lety. Añadió que Salvador falleció a la edad de 36 años en un accidente.
   Con motivo que el Comité de Apoyo de la Casa de la Cultura, en junio de 1966, le rindió un homenaje a los filarmónicos de la Banda Regimental, Marta publicó un folleto titulado "Crónica e Historia de una Banda Musical que desde 1910 es parte Viviente de un Pueblo Llamado Virola".
   La familia Sosa Molina además de numerosa se destacaba en el país desde hace más de cien años. En el Libro Azul, que en 1916 editó el Presidente Carlos Meléndez se publicó en la página 340 la fotografía de la farmacia del Dr. Gerardo Sosa acompañada del siguiente texto: "Dr. Gerardo Sosa. Farmacéutico y agricultor residente en la ciudad de Zacatecoluca".

Farmacia del Dr. Gerardo Sosa (Libro Azul 1916)
     "La Farmacia del Dr. Sosa está sabiamente surtida de tal suerte que llena admirablemente los fines científicos y comerciales para lo que fue fundada. El Dr. Sosa es un infatigable luchador en el campo de los negocios y como tal es considerado y apreciado en la ciudad de su residencia", se lee en el Libro Azul, que puede ser consultado en el FB de Jorge de Sojo Figuerola.
   Lety relató que la farmacia estaba ubicada en la esquina donde actualmente funciona la clínica odontológica del Dr. René Morales López y de su hijo René Morales Parker.
   Destacada vida profesional en el campo del Derecho tuvo también el Dr. Mariano Sosa Molina, hermano de Marta,  quien al cumplir 35 años de ejercer la abogacía le fue entregado una distinción en la Segunda Convención de Jueces y Magistrados de la República.

Dr. Mariano Sosa Molina
    Se desempeñó como secretario de la Gobernación del departamento de La Paz cuando era gobernador el General Jesús Somoza en 1937, diputado de la Asamblea Legislativa de 1943 a 1949, juez en San Juan Opico, Usulután, Santa Tecla y Zacatecoluca. Fue magistrado de la Cámara de Segunda Instancia de la zona oriental, según publicó la revista Asi es mi Pueblo de diciembre de 1989.
   En la actualidad son varias decenas los descendientes de la familia Sosa Molina, muchos viviendo en Zacatecoluca, San Salvador, Italia y otros lugares.
* (Foto familia Sosa. Parados: Mauricio, Alicia, Giordano h., Lety -hija de Gerardo- . Sentados: Giordano p. Mariano, Marta, Gerardo y Besy Sosa Córdova -hija de Mauricio-).

   

Comentarios

  1. Agradezco enormemente el tiempo invertido en la investigación de mi querida y apreciada familia; en especial de mi abuelo amado y respetado Mariano Sosa Molina, de quien recuerdo con mucho amor y sigo sus pasos paulatinamente. He seguido sus comentarios al respecto, admiro la labor que desempeña, al escribir estas líneas. Atte. Dionisio Ernesto Alonzo Sosa, nieto del Doctor Mariano Sosa Molina

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